La dignidad de un hombre
Nunca supimos, la verdadera historia de J.L. El contaba que estuvo casado, que recorrió media Europa y que entro en el mundo de las drogas de forma accidental, que fue su ruina y la de su familia y que la última pareja le tiro la maleta a la calle, no tenia donde cobijarse, por eso vivía en la calle.
Paso por varias cárceles, cuando lo conocí, era un hombre sin esperanza, aun así se recupero rápidamente, estaba desnutrido y muy deteriorado, cuando se recobro parecía otro, nos pidió dinero para pasar algunos días, hasta que encontrara algo, reunimos lo poco que teníamos en ese momento y se lo dimos, no se lo creía y vi como se tragaba las lagrimas, me prometió que cuando ganara algún dinero de aparcacoches nos lo devolvería.
Tres meses después regreso de nuevo, esta vez estaba mucho peor y tardo mas en recuperarse, parecía mas abatido que la vez anterior, después de pasar una larga temporada con nosotros y estar totalmente recuperado se fue casi sin despedirse, una semana después nos mando el dinero en un sobre, al día siguiente lo encontraron en una casa abandonada, había muerto a consecuencia de una sobredosis.
"La muerte es un refugio delicioso para los hombres cansados" (Sófocles)
